Monasterio de Santa María de Sobrado dos Monxes.

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Está considerado el primer Monasterio Cisterciense de España. Pero su historia nace con anterioridad. No fua hasta 1180 cuando la Reina Doña Urraca y su hijo Alfonso VII devuelven el despoblado Monasterio a los Condes de Traba, Don  Bermudo y Don Fernando quienes a instancias del propio Alfonso VII lo donan y fundan el Monasterios de Santa María en Sobrado Dos Monxes, una localidad próxima a Santiago de Compostela y por la que llegan peregrinos procedentes del camino del Norte. Al Sobrado abandonado llegaron 12 monjes más su Abad, que era lo obligado por la legislación del la orden. Provenían de Claraval. En pocos años, los monjes implantan una explotación racional de las tierras.

La edificación está rodeada de jardines y otros edificios. En la actualidad su estado es muy lamentable pero los jardines se conservan algo mejor.

Accedemos la complejo por la «Casa Das Ausencias» y «Vía Sacra». Desde la plaza podemos observar este edificio que se alza sobre el arco. Su fachada recuerda la de los pazos.

Fue restaurada por la Xunta en el año 1997, dentro del plan Xacobeo. Por el lado de la plaza hay una hornacina que aloja a la Virgen, imagen del Siglo XIV. Desde el túnel de la Casa de las Audiencias vemos una bella vista del Monasterio.

RECORRIDO POR EL CONJUNTO DE EDIFICIOS DEL MONASTERIO

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La entrada cuesta 5 Euros y no está guiada, pero te ofrecen un folleto en el que se explica cómo hacer la visita para apreciar mejor el Monasterio. En el folleto dice:

El Monasterio, cuya parte monumental van a visitar, tiene sus orígenes en el Siglo X como cenobio familiar y dúplica perteneciente a la familia del Conde Hermenegildo y formado por dos comunidades, una masculina y otra femenina, balo la advocación del Divino Salvador. 

Como Monasterio Cisterciense, bajo la advocación de Santa María, comienza el 14 de Febrero de 1142, al hacer donación del cenobio el Conde Fernando Perez de Traba y su sobrina Doña Urraca, al Abad Pedro y a los monjes venidos de Claraval.

Fechas importantes jalonan su historia: 1147 El Papa Eugenio III confirma su fundación; 1498 se una a la Congregación Reformada del CISTER; 1600-1700 años de ampliación y grandes reformas del Monasterio; 1834 por una Real Orden se suprimió el Cenobio que trajo consigo el abandono y casi la destrucción del Monasterio; 1954 es el año de comienzo de la restauración  y 1966 la vuelta al cenobio de una pequeña comunidad cisterciense procedente de la Abadía de Viaceli ( Cobreces-Cantabria)

1.- FACHADA PRINCIPAL

Obra de Pedro de Monteagudo, 1676. Sobre el vano rectangular de la puerta, hornacina con la imagen de la Asunción. Frontón partido. Dos partes de columnas enmarcan el cuerpo central y apoyan el entablamiento, del que sobresalen las volutas que sostienen todo el cuerpo superior. Escudo flanqueado por dos columnas y frontón y las insignias imperiales. Un calvario remata este cuerpo. La Torre de la derecha fue abatida por un rayo y reconstruida en 1972.

2.- CLAUSTRO DE LOS PEREGRINOS

Totalmente destruido, excepto dos arcos y reconstruido en 1972. En torno a él se situaban las caballerizas antiguas. Las columnas inferiores son de orden dórico, y las superiores de orden jónico; se levantaron de 1625 a 1635. En su ala izquierda, la escalera principal, también denominada «la Maristela», por la Virgen que la preside. Da acceso a las dependencias privadas del Monasterio que no están incluidas en esta visita turística.

3.- CLAUSTRO DE LOS MEDALLONES

De planta rectangular, totalmente abovedado. Destacan los cuatro ángulos exteriores con su decoración alegórica y los treinta y seis medallones sobre cada ventanal, con bustos representando a santos, personajes bíblicos, monjes, reyes, nobles etc. Construido entre 1741 y 1744, sobre otro románico del S XII.

4. COCINA

Arcos de medio punto y siete compartimentos, de bóveda ojival con aristas reforzadas y rosetones en sus centros. Cuatro sólidas columnas, de las que pendían cadenas colgando sobre la «lareira», sustentan la campana y la chimenea.

5.- SALA CAPITULAR

Sólo quedaba en pie, antes de la restauración, un haz de columnas de la portada. Reconstruida en 1965, conforme exactamente con su primitivo estado del S.XII con bóvedas de arista y resaltes a modo de nervios. Sobresale por esbeltez y pureza del conjunto.

6.- IGLESIA

A la magnificencia impresionante de su fachada corresponde su no menor grandiosidad interior, tanto por sus proporciones, como por lo trabajado de sus piedras. Obra del mismo Pedro de Monteagudo, hacia 1680. Planta de cruz latina, con tres naves. Longitud, 60 m. Altura de la cúpula 35m. Al fondo de la nave central, el coro alto con bóvedas de construcción plana. Una cornisa de más de 1m de ancho recorre toda la Iglesia. Bóveda de medio cañón. Arcos laterales ricamente trabajados con sus arranques igual que el friso de la parte inferior de la cornisa. Magnífica la cúpula con cuatro escudos adosados a las pechinas. En relieve, cruces de Órdenes Militares.

7.- SACRISTÍA

Portada de puras líneas renacentistas. Túnel de entrada profusamente adornado con muy variada flora y fauna. Cúpula esférica, apoyada sobre cuatro trompas aveneradas. En los cuatro ángulos, imágenes de los máximos doctores de la Iglesia latina: S. Gregorio, S. Ambrosio, S. Jerónimo y S. Agustín. En el fondo entrada a la capilla, actualmente vacía, de las reliquias. 

8.- CAPILLA DE SAN JUAN BAUTISTA

Es lo más antiguo que se conserva del Monasterio. Como si fuera la reliquia más representativa del románico típicamente cisterciense por la sobria parquedad de sus elementos decorativos más rústicos. Quizás se trate de una capilla lateral de la iglesia románica del Sobrado ya cisterciense.

9.- CAPILLA DEL ROSARIO

Se atribuye a Domingo de Andrade. Terminada en 1673. Magnífica la portada, enmarcada por dos pares de columnas ornamentadas con capiteles corintios sobre los que descansa un frontón rematado por un cuerpo superior con escudo labrado. Adán y va junto al árbol del paraíso. El barroco es exuberante en el arco de entrada y el conjunto interior, con su cúpula es considerado como el barroco más representativo de GALICIA.

VIDA MONÁSTICA

El estilo de vida de los monjes del Cister es simple y austero, verdaderamente pobre y penitente en la «alegría del Espíritu Santo». Por medio de la acogida y la hospitalidad, la Comunidad puede compartir los frutos de su contemplación y trabajo. Tratamos de conseguir esta búsqueda de Dios bajo una regla, la de San Benito y su Abad en una comunidad de caridad, de una manera responsable, en la que nos comprometemos por el voto de estabilidad.

La comunidad vive en un clima de silencio y separación del mundo que favorece y expresa su apertura a Dios en la contemplación, a ejemplo de María, que consideraba todas las cosas y las meditaba en su corazón. 

Esta sencillez y austeridad de vida se materializan, también, en el estilo arquitectónico de los monumentos cistercienses destacando la simplicidad de líneas y decoración.

En el exterior:

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Tras la visita nos dirigimos a la plaza principal de esta pequeña localidad. Fue interesante y muy ilustrativo pero nos quedó pena al ver el estado interior de la Catedral. Compramos, antes de salir del Monasterio, varias mermeladas y el libro publicado por Ediciones Everest, sobre la historia del Monasterio. También nos informó la persona de recepción que los Monjes ya son mayores y son pocos, sin precisar la cifra, claro, y es muy costoso el mantenimiento del edificio y sus funciones. Observamos, paseando por el exterior, que hubo una fábrica de lácteos, pero nos explicó la recepcionista que ya no se dedican debido a su edad y estado de salud de estos monjes. Sólo a veces hacen visitas guiadas, cuando el número de visitantes es grande o llegan en autocar.

Vimos peregrinos en el interior del Monasterio y supimos que también es albergue.

Lo más impresionante, a parte del Monasterio, fue la carretera por la que llegamos hasta Sobrado dos Monxes, ya que es un trazado de curvas rodeando el camino un frondoso bosque variado y verde que nos dejó sorprendidos. Galicia tiene un color verde muy especial. A pesar del cambio climático, la escasez de lluvia y las altas temperaturas en estos días de Agosto, el verde es espectacular.

Y seguimos camino de regreso a CASA DAS CORREDOIRAS en Arzúa, donde pasamos unos días descansando y apreciando rincones que no puedo valorar cuando peregrino por estas tierras cada año entre Mayo y Septiembre.

Es una visita interesante y obligada de hacer si tienes vehículo propio o medio de llegar hasta este rincón del Mundo.

 

 

 

 

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